Algunos objetos pueden parecer juguetes por su apariencia, pero realmento no lo son porque los niños pueden hacerse daño durante el juego. Una normativa española señala más de 20 artículos con estas características.
En la Unión Europea no todos los juguetes se consideran aptos para los bebés y niños.
La actual directiva (93/68/CEE) obliga a todos los estados de la unión a establecer una normativa propia con el fin de asegurar que todos los juguetes que se comercializan en el marco comunitario cumplan con unas normas de seguridad determinadas.
Existen objetos parecidos a los juguetes que no se consideran seguros para los niños ya que por sus características podrían poner en peligro la integridad física del niño.
En España, la normativa señala un listado de objetos que no se consideran juguetes y que, por tanto, no están regulados por el Real Decreto 204/1995 relativo a las normas de seguridad de los juguetes.
Algunos de los artículos que no se consideran juguetes, de los más de veinte que señala la legislación española, son:
- Piezas o modelos construidos a escala (maquetas, muñecos…), los artículos decorativos o los coleccionables
- Puzzles de más de 500 piezas
- Hondas o los tirachinas
- Bicicletas
- Chupetes
- Juegos de vídeo
- Joyas de fantasía destinadas a niños