El paracetamol es uno de los medicamentos de elección para paliar el dolor en mujeres embarazadas, ya que no está contraindicado durante la gestación. El uso del paracetamol ya había estado asociado con un incremento de asma en niños y adultos, pero no se había realizado un estudio de amplio alcance que relacionara este efecto en la exposición prenatal. Los resultados del estudio revelan un incremento del 20% del riesgo de padecer asma durante los primeros 18 meses de vida del bebé. Este riesgo se incrementa hasta el 50% si el estudio se amplia hasta los siete años.
Un estudio, publicado en el número de abril de 2008 por la revista International Journal of Epidemiology, señala que el uso del paracetamol durante el embarazo aumenta el riesgo de padecer problemas respiratorios, como el asma, en el bebé y en el niño.
Este dato es especialmente relevante si se tiene en cuenta que el paracetamol es uno de los medicamentos de elección para paliar el dolor en mujeres embarazadas, ya que no está contraindicado durante la gestación.
Hasta el momento, el uso del paracetamol ya había estado asociado con un incremento de asma en niños y adultos, pero no se había realizado un estudio de amplio alcance que relacionara este efecto en la exposición prenatal.
El trabajo, realizado por el Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL) y el Instituto Municipal de Investigación Médica (IMIM-Hospital del Mar) de Barcelona contó, asimismo, con la colaboración del Instituto de Salud Pública de la Universidad de Aarhus de Dinamarca y de otros expertos internacionales.
Los expertos realizaron un seguimiento de 66.445 embarazadas de procedencia danesa que, durante la gestación, habían consumido algún tipo de analgésico o paracetamol, disponibles en Dinamarca. Después de dar a luz, y al cumplir 18 meses sus hijos, estas mujeres accedieron a participar en una entrevista. El objetivo era conocer el porcentaje de bebés que habían padecido problemas respiratorios durante ese periodo de tiempo.
Más tarde, cuando sus bebés habían cumplido siete años, los investigadores consiguieron ponerse en contacto, nuevamente, con 12.733 madres que ya habían participado en el estudio.
Los resultados revelaron un incremento del 20% del riesgo de padecer asma durante los primeros 18 meses de vida. Además, este riesgo se incrementaba hasta el 50% si el estudio se ampliaba hasta los siete años.
Los investigadores concluyen que es necesario seguir investigando sobre el tema y conocer el alcance real de este medicamento durante el embarazo.