No existe unanimidad entre los expertos acerca de cuándo bañar al bebé recién nacido por primera vez. Lo que, en cualquier caso, se recomienda, es evitar que la herida del cordón umbilical se humedezca en exceso. Después del primer baño, con tres baños a la semana será suficiente para mantener al bebé limpio.
Entre los expertos existen distintas opiniones en lo referente al primer baño del recién nacido. Algunos opinan que no es aconsejable bañar a los bebés hasta que la herida del cordón umbilical haya cicatrizado por completo.
Otros recomiendan hacerlo desde el primer día, siempre que el ombligo no se moje en exceso y se seque y cure cuidadosamente después. Así se reducen las posibilidades de infección de la herida del cordón umbilical.
Desde el punto de vista de la higiene, basta con bañar a los bebés dos o tres veces por semana.
El resto de los días se le puede asear con una esponja vegetal y agua templada y limpiar los pliegues de las piernas, los brazos y el cuello con un aceite especial para bebés.
Los pediatras recomiendan no usar jabón durante los primeros días, ya que éste elimina la capa de grasa que recubre la piel del bebé al nacer.